Las 69.300 botellas que salieron al mercado fueron realizadas en colaboración con el arquitecto y artista visual Gaspar Libendisky, y el dibujante Costhanzo, ambos argentinos. Además, la dirección creativa y las fotos también fueron realizadas en nuestro país, generando así la primera campaña de Absolut hecha íntegramente en esta tierra.
Según Libendisky y Costhanzo, el diseño de la botella es una mezcla entre un rompecabezas y un laberinto, intentando reflejar la complejidad del espíritu porteño. Allí se mezclan el fútbol, la arquitectura, el tango, el colectivo “60”, los taxis, la pizza, la calle Corrientes, entre otras imágenes.
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Con “Cocktail City”, Buenos Aires es una más de las ciudades que ya fueron homenajeadas por Absolut. Desde 2007, con la botella de New Orleans, la marca de vodka ha presentado su versión de Londres, Moscú, Vancouver, Berlín y San Francisco, entre otras.
De acuerdo con la palabra de sus autores, la idea es que la botella perdure más allá del consumo, convirtiéndose en una pieza de arte y, en el mejor de los casos, en un clásico.
