Caroline Foster, también conocida como Wilderness Addict, es una genial fotógrafa. Autodidacta, aventurera y adicta a la montaña. Nació en Nueva Zelanda y actualmente vive y trabaja en Montana, Estados Unidos. El turismo en modo imagen llegó y está entre nosotros.
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Consultada acerca de las mejores vistas para retratar, Caroline Foster asegura que la mayoría de sus fotos no ocurren en verano, sino en el invierno.
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“El glaciar es un sueño para los amantes de la montaña frecuentado por millones de personas durante los meses de verano. Desconocida para muchos es la magia de este paraíso montañoso durante los meses más fríos. La verdad es que esto es cuando las multitudes desaparecen y la magia sucede. Imaginen puestas de sol en el lago McDonald con solo una familia de ciervos con quien compartirlas. Esquí de fondo en Two Medicine sin ver un alma, solo algunas pistas de animales de montaña. Andar en bicicleta o pasear por el camino cerrado que va hacia el camino del sol con solo una manada de ciervos Elk por compañía. Momentos tranquilos de contemplación en el viejo puente Belton, mientras que los copos lentos perfectos flotan lentamente desde el cielo. Estas son solo algunas de las razones por las cuales el glaciar en el invierno es pura magia”.
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