Por | nmdarq | Fotografía | Ivo Tavares Studio
Ubicado en una de las principales arterias de la ciudad de Lisboa, Avenida Almirante Reis, Departamento AN es parte integral de un edificio construido en la década del 40 del siglo pasado.
Fue diseñado por el arquitecto Manuel Norte Junior (1878-1962). Cuyas obras son fácilmente identificables por la introducción de elementos decorativos inspirados en el Art Nouveau, distinguidos en varias obras en la ciudad de Lisboa con el Premio Valmor.
El edificio en cuestión, una de las últimas obras de arquitecto, se creó en un momento en que Júnior intentaba alejarse del eclecticismo por el cual era conocido. Manteniendo, de alguna manera, su impronta frente al surgimiento del modernismo.
Este hecho está muy presente tanto en el edificio como en los departamentos. En este caso, a pesar de haber sido objeto de intervenciones a lo largo del tiempo, se conservaron en la propiedad algunos elementos decorativos de la época, como los techos trabajados en las áreas sociales.
Con amplias áreas y espacios bien distribuidos e iluminados, el proyecto se centra fundamentalmente en adaptar lo existente a los nuevos usos contemporáneos. Preservando los valores de identidad y memoria aún presentes en el departamento.
Con dos accesos independientes, el principal y uno de servicio con acceso directo a la cocina, la propuesta busca mantener los accesos y su jerarquía espacial, proponiendo la introducción de un pequeño vestíbulo en la entrada principal. La modificación del área de la cocina y la transformación del departamento en solo dos dormitorios, uno de los cuales es el dormitorio principal con un amplio vestidor y una pequeña oficina.
Departamento AN mantiene la ubicación de los espacios sociales existentes, preservando sus dimensiones. Y por lo tanto, sus techos.
La falta de un hall de entrada en el departamento, cuyo acceso era inmediatamente precedido por el pasillo de circulación, creó un desafío para la introducción de esta área en un espacio pequeño sin luz natural. Lo cual se logró parcialmente a través de la “semi-apertura” del hall de entrada hacia la biblioteca, separada por un banco y un deslizador suspendido en un espejo.
El hall de entrada marca el primer momento de entrada al departamento, permitiendo la conexión con el interior del departamento a través de dos grandes puertas. La puerta corrediza que da acceso a un salón y la otra puerta pivotante que se abre al extenso pasillo que da acceso a los demás compartimentos.
El pasillo se caracteriza por la reinterpretación de su zócalo, compuesto por una franja horizontal y una cenefa vertical en madera lacada en blanco. Esta característica también se identifica en el espacio del hall de entrada.
Recorrer el pasillo permite el acceso a la sala de estar y al comedor, que se comunican entre sí y con el salón y la biblioteca. Todos ellos diferentes entre sí debido a sus techos tallados. A través del pasillo, también se accede a la cocina, que ha sufrido una profunda transformación para hacerla más funcional y adaptada a los nuevos requisitos, con un revestimiento de mosaico cerámico tridimensional de colores.
La cocina también cuenta con un amplio balcón a través del cual se puede acceder a la habitación de servicio y al área de lavado.
Por último, la zona más privada del departamento consta principalmente de dos dormitorios y un baño para apoyar a uno de los dormitorios. Uno de los dormitorios, considerado el principal. Está compuesto por un pequeño pasillo de circulación que separa el área del vestidor de la zona de descanso.
Este dormitorio se caracteriza no solo por su techo, sino también por la pared del cabecero de la cama. Compuesta por elementos verticales de madera de nogal que también se utilizan para iluminar la habitación. Desde el área del vestidor se accede al pequeño despacho y al baño privado.
La transformación de estos últimos espacios (cocina y dormitorio principal) requirió una mayor intervención y fue necesario garantizar la integridad estructural del edificio mediante la adopción de una solución de refuerzo estructural con una estructura de acero. Debidamente articulada con la construcción existente, que consta de losas de madera, paredes de ladrillo macizo de arcilla en el interior y paredes exteriores de mampostería de piedra.
En cuanto a la materialidad, se pudo recuperar prácticamente todo el piso de madera existente. Reemplazando el piso en las áreas húmedas, como la cocina y las instalaciones sanitarias, que estaban en mal estado.
Algunos elementos de madera existentes, como puertas y zócalos, se recuperaron y/o reemplazaron parcialmente por réplicas para salvaguardar el valor de la memoria del espacio.
Los nuevos materiales y elementos introducidos están en armonía con los existentes. Claramente identificados en su época, destacándose y aportando valor estético y funcional a toda la propuesta. Como en el caso del zócalo, cuyo diseño acanalado se refleja en la isla de cocina y en su revestimiento, utilizando cerámica artesanal diseñada exclusivamente para este propósito.
La propuesta de iluminación, en su mayoría de difusión indirecta, se destaca en ciertos espacios como protagonista principal. Pero en otros se asume como una ayuda para resaltar algunas piezas o elementos decorativos.
Además de preservar elementos presentes en el departamento, también fue necesario salvaguardar la existencia de algunos muebles y piezas decorativas que los propietarios tenían en su posesión y deseaban conservar.
Este hecho se convirtió en una ayuda en el desarrollo de Departamento AN. Buscando espacios específicos para la ubicación de dichos objetos, haciéndolos parte del conjunto arquitectónico.
FICHA TÉCNICA
Arquitectos: nmdarq.
Ubicación: Lisboa, Portugal.
Área del proyecto: 255 metros cuadrados.
Año del proyecto: 2022.
Fotografía: Ivo Tavares Studio.