Fotos | @mauritius
Lejos de la imagen de la selva y los safaris, África tiene sitios de ensueño que vale la pena recorrer. Uno de ellos es Mauricio, la nación insular, rodeada de arrecifes de coral, con kilómetros de playas de arena blanca y aguas claras y calmas.
Su ubicación privilegiada, cerca de Madagascar y en pleno Océano Índico, la dotan de temperaturas veraniegas y un clima tropical para disfrutar durante todo el año. Además de sus hermosas playas, las montañas también dicen presente.
El estrés queda de lado cuando llegamos a esta isla, con cientos de opciones de alojamiento de gran nivel, que cuentan con las comodidades para una estadía con todo al alcance de la mano.
Rodeada de cristalinas aguas y playas de baja profundidad, las actividades más buscadas por quienes llegan a Mauricio son el buceo con esnórquel, el windsurf o el esquí acuático.
Bajo el agua, se puede encontrar con experiencias inolvidables como nadar junto a los delfines o simplemente bucear junto a un grupo de ballenas durmiendo.
Rodeado de vegetación, con el mar en el horizonte y cálidas brisas, lejos de los hoteles, también se puede encontrar en Mauricio, solitarias casas para disfrutar de unas vacaciones románticas.
Y no todo en esta isla es arena y mar. Las montañas que se elevan por la isla nos ofrecen diversas rutas para hacer trekking obteniendo hermosas vistas desde la altura como en Le Morne, o también llegar a pasajes escondidos maravillosos como Alexandra Falls, o las Siete Cascadas.