Por | Silverline | Fotografía | Ivo Tavares Studio
Casa M es una vivienda unifamiliar de dos pisos. El terreno presenta un desnivel significativo de aproximadamente 3 metros entre la acera y su punto medio. Para responder a este desafío y al mismo tiempo aprovechar el potencial del terreno, se adoptó un sistema de «medio piso».

La fachada orientada hacia la vía pública se presenta como un volumen compuesto solo por un piso, mientras que la parte posterior de la vivienda se desarrolla en dos niveles distintos.
Así, la entrada peatonal y vehicular se desarrollan a la cota de la acera, conduciendo a un medio piso superior, donde se encuentran las áreas privadas, y a un medio piso inferior, destinado a las áreas sociales, situadas sensiblemente a la cota del terreno existente.

Aunque este nivel inferior se designa como piso -1, ninguna de las áreas habitacionales se encuentra enterrada, ya que toda la fachada está orientada hacia el este, sur y oeste, garantizando iluminación y ventilación naturales.

Esta solución permite aprovechar la pendiente pronunciada del terreno, integrando la construcción de forma armoniosa en la topografía existente.

La organización programática del proyecto se estructura en tres áreas distintas. Tras la entrada al interior de la vivienda, se encuentra un vestíbulo desde el cual se distribuyen todos los espacios habitacionales.
En el mismo piso de la entrada se accede también a un garaje cubierto con capacidad para tres vehículos, a un área técnica y a una habitación de visitas/oficina con instalación sanitaria privada.
Las áreas privadas incluyen una suite principal y dos suites de menores dimensiones, todas equipadas con instalaciones sanitarias, clóset, dormitorio y balcones. Todo el piso superior, incluidos los portones del garaje, están revestidos con un listón de madera maciza, conferiendo uniformidad al espacio y proporcionando un ambiente más acogedor.

El piso inferior ha sido destinado a todas las áreas de recreo, con acceso directo al exterior a través de grandes ventanales. En este piso, se encuentran la sala común, la cocina, una lavandería, una instalación sanitaria de servicio y una pequeña sala de juegos.
Las amplias aberturas permiten la continuidad visual y funcional entre los espacios interiores y exteriores, a través de dos terrazas cubiertas que ofrecen acceso a un jardín y a una piscina.

Las áreas sociales han sido concebidas como un espacio único y continuo, integrando la sala de estar, el comedor y la cocina. La transición entre las diferentes áreas es sutil, siendo reforzada por el uso de materiales uniformes, como la madera para el mobiliario y el microcemento en el pavimento, promoviendo una sensación de continuidad y amplitud.

La transición entre la sala y la cocina puede ser interrumpida a través de dos paneles de madera, permitiendo ajustar la apertura y la privacidad según sea necesario. También, la cocina se diseñó con un sistema de paneles que, cuando están cerrados, permiten ocultar todos los elementos funcionales del espacio – armarios, encimeras, electrodomésticos y utensilios, reforzando el carácter multifuncional del ambiente.

Este proyecto residencial se caracteriza por un enfoque contemporáneo, integrando materiales naturales y soluciones arquitectónicas que favorecen la fusión entre los espacios interiores y exteriores.
El diseño de Casa M privilegia la amplitud y la fluidez de los espacios, otorgando un ambiente acogedor y funcional. La composición volumétrica destaca por el juego de materiales, combinando hormigón expuesto, madera y piedra, que confieren un carácter robusto y elegante a la construcción.

FICHA TÉCNICA
Arquitectura: Silverline.
Ubicación: Arcozelo, Portugal.
Año: 2024.
Área: 406 metros cuadrados.
Fotografía: Ivo Tavares Studio.