Este loft moderno es un reflejo de la constante renovación de Barcelona. Lo que en su momento fue un establo y luego una imprenta, se ha transformado en un hogar contemporáneo que combina historia y vanguardia.
El lugar fue completamente transformado y renovado por los reconocidos desarrolladores y diseñadores de lofts urbanos Benito Escat y Alberto Rovira, en colaboración con el prestigioso estudio de diseño interior Minim, quienes aportaron su experiencia para fusionar lo antiguo con lo moderno.
Cada detalle fue pensado para aprovechar al máximo las cualidades estructurales del edificio original, respetando su historia y dándole un aire contemporáneo y sofisticado.
El diseño interior de este loft moderno aprovecha la forma rectangular y alargada del espacio, que se divide en dos grandes niveles, proporcionando una distribución equilibrada y funcional que abarca más de 799 m² en total.
Este amplio metraje permite áreas abiertas y luminosas que maximizan la sensación de amplitud y fluidez en cada rincón.
Para preservar el carácter auténtico del espacio, se optó por dejar a la vista las paredes de ladrillo originales, que aportan calidez y textura al ambiente.
Además, la altura del techo se ha aprovechado al máximo, creando una sensación de grandeza y amplitud que resalta cada rincón y contribuye a que este loft se convierta en un lugar verdaderamente espectacular.
La combinación de elementos industriales y modernos da como resultado un espacio único que equilibra el encanto histórico con la funcionalidad contemporánea.