Fotos | @norwegianfjords
Europa mantiene al tren como un medio de transporte confiable y que se ha convertido además, en una experiencia turística en sí misma. En Noruega, el Tren de Flam está señalado como uno de los viajes en tren más bonitos del mundo.
Este trayecto es una de las principales atracciones turísticas de Noruega y se extiende por una hora. Se parte desde Flam, junto al fiordo de Sogn y se sube hasta la estación de montaña de Myrdal, a 867 metros.
La revista National Geographic Traveler tiene al Tren de Flam entre los diez mejores viajes en tren del Viejo Continente. A su vez, Lonely Planet Traveller lo eligió como el mejor recorrido en ferrocarril del mundo hace unos años.
Los compartimentos de la formación tienen un estilo vintage con unos enormes ventanales que nos permiten ver los diferentes paisajes que atraviesa el tren en su ascenso. Al llevar una velocidad lenta, tendremos mucho tiempo para admirar los paisajes.
El Flam es una de las líneas ferroviarias más empinadas del mundo. A lo largo de sus 20 kilómetros de recorrido va desde el nivel del mar hasta los 865 metros de altura, con una pendiente de 1 en 18.
Además de los paisajes de ensueño, el tren pasa por 20 túneles que totalizan 6 kilómetros del trayecto, demostrando el enorme trabajo de ingeniería para construir el mismo.
Viajar en este idílico tren es una aventura como ninguna otra y una actividad de ensueño para cualquiera que no pueda resistirse a las vistas espectaculares.