Por | Leo Romano | Fotografías | Edgard César
La residencia ubicada en la Residencial Aldeia do Vale en Goiânia, tenía un Ipé Amarillo centenario como el elemento principal para definir el diseño de su arquitectura. En el terreno longitudinal, de 25m del frente por 100m de profundidad, el acceso a la casa se realiza por una pasarela que nos lleva a la entrada principal.


Cuando cruzás el pórtico de ingreso, la casa se despliega con sobriedad y sin ornamentos innecesarios. Todo el sector público se abre en una planta continua que se conecta con el área de ocio, logrando una integración armónica entre el interior y el exterior.
La amplitud de los ambientes y su funcionalidad destacan desde el primer vistazo, generando una atmósfera acogedora y contemporánea. Grandes ventanales y la disposición del mobiliario refuerzan esta sensación de fluidez y confort.
Desde el otro extremo, un pasillo discreto organiza la circulación hacia la zona privada. Este recorrido, pensado para garantizar tranquilidad y reserva, conduce a las habitaciones sin interferir con las actividades sociales de la casa. La privacidad está cuidadosamente resguardada sin necesidad de puertas o separaciones rígidas.

La volumetría del proyecto hace foco en un gesto arquitectónico central: la pared de circulación que abraza al imponente Ipé amarillo, un árbol centenario que se convierte en el corazón simbólico del hogar. Esta estructura genera un límite físico y, al mismo tiempo, contiene una oficina íntima, rodeada de naturaleza y calma.
En el sector posterior, la losa se curva suavemente, marcando una transición elegante entre los espacios públicos y los privados, y aportando dinamismo a la silueta general.


Casa Ipé no es solo una vivienda: es un lugar pensado para disfrutar de cada momento, conectar con la naturaleza y vivir con plenitud. Un hogar diseñado para ser feliz.

FICHA TÉCNICA
Arquitectos: Leo Romano.
Ubicación: Residencial Aldeia do Vale, Brasil.
Área proyecto: 482.0 metros cuadrados.
Año proyecto: 2018.