Fotografía|@abelpintos
Abel Pintos se casó con Mora Calabrese en plena pandemia. Luego del nacimiento de su primer hijo, Agustín, decidieron mudarse a una hermosa casa en Resistencia, Chaco.
Rodeada de verde, la vivienda donde viven Abel Pintos y Mora Calabrese presenta una impronta moderna.
Abel Pintos disfruta de la compañía de su esposa, su hijo Agustín, y Guillermina, la hija del primer matrimonio de su pareja, con quien ha forjado un vínculo entrañable.
A la felicidad familiar, se ha sumado la llegada de Rosario, la nueva integrante y segunda hija de la pareja, que ha colmado de alegría sus vidas.
En la cocina, se percibe una cuidadosa combinación entre tonalidades claras y oscuras que no solo crea un contraste visual interesante, sino que también aporta un equilibrio armonioso al ambiente.
Los tonos claros, como los beige o blancos, brindan luminosidad y una sensación de amplitud, mientras que los colores oscuros, como el negro o el gris, añaden profundidad y sofisticación al espacio, generando una atmósfera moderna y acogedora al mismo tiempo.
Los estantes flotantes, confeccionados en madera natural, se integran perfectamente en el diseño, aportando calidez y un toque de estilo personal.
Estos estantes no solo sirven para almacenamiento, sino que también se utilizan como vitrinas para exhibir elementos decorativos cuidadosamente seleccionados, como piezas de cerámica, libros de cocina, y plantas, que le otorgan un aire fresco y acogedor al entorno.
Entre los objetos que destacan, hay algunas fotografías familiares que capturan momentos importantes y emotivos, aportando una conexión personal que refuerza la identidad del espacio y convierte a la cocina en el corazón de la casa, donde se mezcla la funcionalidad con los recuerdos más queridos.