Fotografía | Ewout Huibers
Ubicado en los pisos superiores de una torre residencial en Ámsterdam, este departamento moderno redefine el concepto de refugio urbano.
Diseñado por i29, el espacio combina funcionalidad, vistas panorámicas y un diseño minimalista de líneas limpias, logrando una atmósfera tan elegante como confortable.
Desde la cocina hasta el dormitorio, cada rincón está pensado para potenciar la luz natural y enmarcar la ciudad como si fuera una obra de arte.
VISTAS PANORÁMICAS Y CONEXIÓN CON LA CIUDAD
La gran protagonista de este departamento moderno en Ámsterdam es la vista: amplias ventanas de piso a techo capturan el paisaje urbano, los canales y los característicos techos de la ciudad.
Pero no se trata solo de mirar hacia afuera, sino de integrar ese paisaje a la vida cotidiana. Por eso, i29 diseñó interiores sobrios y despejados, que funcionan como un marco para el espectáculo natural y arquitectónico que ofrece la ciudad.
La conexión con el exterior no se limita a lo visual: materiales naturales como la madera de roble, el mármol y el lino aportan una sensación táctil que complementa la serenidad visual del proyecto.
UNA COCINA ESCULTÓRICA COMO CORAZÓN DEL HOGAR
En el corazón del espacio, la cocina abierta se presenta como una verdadera pieza escultórica. Con una isla de piedra gris y superficies integradas, su diseño limpio y funcional se destaca sin interrumpir la continuidad visual del ambiente. No hay manijas a la vista, ni adornos innecesarios: todo está pensado para que lo esencial hable por sí solo.
La iluminación indirecta resalta la textura de los materiales, mientras que los electrodomésticos ocultos refuerzan el estilo contemporáneo del departamento.
TONOS NEUTROS Y MÁXIMA CONTINUIDAD VISUAL
La paleta de colores está dominada por grises cálidos, blancos rotos y acentos de negro mate. Esta elección potencia la continuidad entre ambientes y refuerza la calma visual que define todo el departamento. En el mobiliario, se repite la idea de integrarse al espacio sin imponerse: mesas flotantes, estanterías empotradas y textiles livianos generan una estética elegante y sin esfuerzo.
Incluso en el dormitorio, el diseño prioriza el descanso visual. Una cama baja y sin cabecera, junto a cortinas livianas y un placard oculto, ofrecen un refugio íntimo sin perder la coherencia estilística con el resto de la vivienda.
UN DEPARTAMENTO MODERNO EN ÁMSTERDAM QUE DIALOGA CON EL CIELO
Más que un interior sofisticado, este departamento moderno en Ámsterdam propone una forma de habitar donde el paisaje, la luz y el silencio toman protagonismo. La arquitectura de i29 no busca destacar por su extravagancia, sino por su precisión, su elegancia serena y su capacidad para amplificar la belleza que ya ofrece la ciudad.
El resultado es un oasis suspendido sobre Ámsterdam, donde el diseño funciona como puente entre el interior y el cielo.