Las instalaciones del artista noruego Rune Guneriussen se presentan como un proyecto que diluye la fotografía y la instalación y, al mismo tiempo, “el balance entre la naturaleza y la cultura humana, a la par de todos los subniveles de nuestra propia existencia”, según describe en su sitio.
Libros, globos terráqueos, lámparas, teléfonos inalámbricos y más se juntan como una manada de animales y un extraño sentimiento de sociedad es visible que nace a partir de su convivencia con la naturaleza.
“No es tanto la fotografía como la escultura y la instalación”, dice afirma Guneriussen. “Este proceso implica el objeto, la historia, el espacio y, lo más importante, el tiempo que se hace dentro. Es un acercamiento al equilibrio entre la naturaleza y la cultura humana, y todos los subniveles de nuestra propia existencia”.
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Las instalaciones son hechas específicamente para cada lugar que Rune Guneriussen fotografía, no hay ninguna manipulación digital posterior al momento de la captura.